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purgar radiadores

Cómo y cuándo purgar los radiadores de la calefacción

El mantenimiento de la calefacción en tu hogar es esencial para garantizar su eficiencia y funcionamiento adecuado. Para ello, es muy importante purgar los radiadores de la calefacción antes de que comience la temporada de encenderlos.

¿Te da un poco de miedo y quieres saber cómo se hace? No te pierdas este post que hemos preparado, ¡encontrarás toda la información que necesitas!

Cuándo es conveniente purgar los radiadores

Purgar los radiadores es una tarea que no debes pasar por alto, ya que la acumulación de aire en el sistema puede reducir la eficiencia de la calefacción. Aquí te indicamos cuándo es conveniente purgarlos:

  • En el inicio de la temporada de calefacción. Antes de encender la calefacción en otoño o invierno, es recomendable purgar los radiadores. De esta manera, te asegurarás de que estén en óptimas condiciones para proporcionar el calor necesario.
  • Si los radiadores están fríos a pesar de estar encendidos. Si notas que la parte superior de un radiador se mantiene fría mientras el resto se calienta, es una señal clara de que se necesita purgar.

Por norma, se aconseja realizarlo entre septiembre y octubre, antes de que se encienda la calefacción por primera vez.

Esto se debe realizar con todas las instalaciones de calefacción a gas, independientemente de si se trata de calefacción central o individual. En el primer caso, habrá que avisar al responsable de la instalación para que comunique si se ha procedido o no al llenado de agua de la instalación; de ser así, los vecinos podrán comenzar con las purgas.

Señales para saber si tengo que purgar los radiadores

Además de los momentos clave para purgar los radiadores, existen señales que te indicarán si es necesario llevar a cabo esta tarea:

  • Radiadores fríos en la parte superior o en la parte inferior. Si sientes que solo una parte del radiador se calienta, es probable que haya aire atrapado en su interior.
  • Calefacción ineficiente. Si tu sistema de calefacción no calienta la habitación de manera eficiente como solía hacerlo, es probable que los radiadores necesiten purgarse.
  • Ruidos de gorgoteo. Si escuchas ruidos de gorgoteo en los radiadores cuando están encendidos, es probable que haya aire atrapado en el sistema.

¿Cuándo se purgan los radiadores: encendidos o apagados?

Es conveniente purgar los radiadores con la caldera encendida en modo de calefacción de invierno. Se aconseja que la caldera se desconecte unas horas antes de purgar para que el aire suba hasta la parte superior del radiador.

Beneficios de purgar los radiadores

Purgar los radiadores de la calefacción con regularidad ofrece varios beneficios:

  • Mejora la eficiencia energética. Al eliminar el aire atrapado en los radiadores, el sistema de calefacción funciona de manera más eficiente y consume menos energía. De esta forma, ahorramos en la factura del gas, ya que calienta de forma rápida y eficiente.
  • Distribuye el calor de manera uniforme. Los radiadores purgados calientan de manera uniforme, evitando zonas frías en las habitaciones.
  • Aumenta la vida útil del sistema. El oxígeno que se encuentra en las tuberías se puede volver corrosivo, y llegar incluso a dañar la capa protectora. Por eso, mantener el sistema en óptimas condiciones reduce el desgaste y prolonga su vida útil.

Cómo purgar un radiador

Purgar los radiadores de tu sistema de calefacción es una tarea esencial para mantener el confort en tu hogar y ahorrar energía.

La purga de radiador se debe realizar en aquellos que tengan una válvula manual, ya que las automáticas (frecuentes en los radiadores de aluminio) suelen contar con un sistema de autopurgado que expulsa el aire de forma automática, por lo que no necesitan una purga manual.

Ahora sí, te contamos el paso a paso para purgar un radiador:

  1. La caldera debe estar encendida y en el modo calefacción de invierno.
  2. Localiza los radiadores que necesiten ser purgados y comienza por el que se encuentra más cerca de la caldera.
  3. Coloca un vaso o recipiente bajo el purgador para que el agua que salga del radiador caiga ahí. Puedes colocarlo en el suelo y, si lo ves necesario, extender alguna toalla o trapo que absorba la posible humedad que no entre en el vaso.
  4. Gira el tornillo evacuador en el sentido contrario a las agujas del reloj poco a poco. Puedes ayudarte de un destornillador plano o una llave específica si la válvula es distinta. Recuerda hacerlo poco a poco, porque hacerlo rápidamente hará que salga demasiada agua de golpe y no servirá de nada.
  5. Oirás un silbido. Significa que el aire está saliendo. Sabrás que ha acabado porque el aire empezará a agotarse y saldrá un poco de agua.
  6. Espera a que salga un poco de agua y cierra la válvula del purgador.
  7. Revisa nuevamente la caldera y comprueba que la presión está entre 1 y 1,5 bares.
  8. Repite estos pasos con cada radiador, y recuerda revisar la presión de la caldera tras cada purga.

Purgar los radiadores es una tarea muy sencilla que es conveniente hacer antes de que empiece la temporada de poner la calefacción.  Así, disfrutarás de un invierno cálido en la comodidad de tu hogar.