Los derechos de enganche de la luz son un aspecto fundamental a considerar al establecer una nueva conexión eléctrica en cualquier inmueble. Estos derechos se relacionan con el proceso inicial de suministro de electricidad, implicando una serie de pasos técnicos y administrativos que las compañías eléctricas deben llevar a cabo. Comprender la naturaleza y el coste de estos derechos es esencial para los consumidores, tanto nuevos como existentes, para planificar adecuadamente sus gastos y garantizar un servicio eléctrico conforme a la normativa vigente. En este post veremos en detalle qué son los derechos de enganche y cuánto cuestan, ofreciendo una guía completa sobre este importante componente del suministro eléctrico. ¡Vamos allá!
Qué son los derechos de enganche de luz y para qué son necesarios
Los derechos de enganche de luz son una tasa regulada que se paga al dar de alta un nuevo suministro eléctrico, reactivar uno inactivo o realizar modificaciones en el contrato de luz. Este coste cubre los gastos asociados a la conexión del suministro a la red eléctrica y garantiza que el punto de suministro cumple con las normativas técnicas y de seguridad vigentes.
Cuando se da de alta la luz
Cuando se da de alta la luz en una vivienda o local, además de los derechos de enganche, es necesario abonar otros conceptos como los derechos de acometida y los derechos de extensión. Los derechos de acometida cubren la instalación física que conecta la red eléctrica general con el punto de suministro, mientras que los derechos de extensión se aplican en casos donde es necesario ampliar la red para llegar a la nueva instalación. Estos tres conceptos aseguran que el nuevo suministro está correctamente conectado y funcional, cumpliendo con todas las regulaciones necesarias.
Reactivar un punto de suministro inactivo
Reactivar un punto de suministro que ha estado inactivo sigue un proceso similar al de dar de alta la luz por primera vez. En este caso, también es necesario pagar los derechos de enganche, acometida y extensión. La razón es que, aunque el suministro ya exista, se necesita verificar y asegurar que toda la infraestructura cumple con las normativas actuales antes de reanudar el servicio.
Modificaciones en la potencia contratada
Cuando se realizan modificaciones en la potencia contratada, ya sea un aumento o una disminución, también se deben abonar los derechos de enganche. Este coste se justifica porque ajustar la potencia contratada implica una intervención técnica en el punto de suministro, asegurando que el nuevo nivel de potencia sea adecuado y seguro para la instalación.
Si cambias el tipo de tarifa
Cambiar el tipo de tarifa, por ejemplo, de una tarifa fija a una con discriminación horaria, también requiere el pago de los derechos de enganche. Este tipo de modificación no es lo mismo que cambiar de tarifa dentro de la misma modalidad ni cambiar de compañía eléctrica, ya que en estos dos últimos casos no es necesario abonar los derechos de enganche. La razón es que cambiar el tipo de tarifa implica una reconfiguración técnica del contador y del sistema de facturación, garantizando que se ajusta correctamente al nuevo esquema tarifario.
Cuánto cuestan los derechos de enganche
El coste de los derechos de enganche varía según la tensión de la instalación. A continuación, se muestra una tabla con los precios actuales sin IVA:
| Tensión | Precio |
| Baja tensión hasta 9.2 kV | 9,04 € |
| Alta tensión hasta 36 kV | 79,49 € |
| Alta tensión entre 36 kV y 72,5 kV | 266,75 € |
| Alta tensión mayor que 72,5 kV | 374,54 € |
¿A quién se abonan?
Los derechos de enganche se abonan a la empresa distribuidora de electricidad. Sin embargo, es la compañía comercializadora la que incluye este coste en la factura del cliente y luego transfiere el importe a la distribuidora.
¿Tengo que volver a pagar los derechos de enganche si cambio la potencia?
Sí, cada vez que se realiza un cambio en la potencia contratada, se deben pagar nuevamente los derechos de enganche, independientemente de si se aumenta o disminuye la potencia.
¿Y si veo que en la vivienda hay un enganche ilegal de luz?
Descubrir un enganche ilegal de luz en una vivienda es una situación seria que debe abordarse de inmediato debido a sus peligros y consecuencias legales. Los enganches ilegales representan un riesgo significativo de incendios y sobrecargas eléctricas, poniendo en peligro la seguridad de todos los ocupantes del edificio.
Desde el punto de vista legal, realizar un enganche ilegal de luz es un delito que puede conllevar severas sanciones, incluyendo elevadas multas, que pueden ir desde los 1.000 o 2.000 euros, y posibles penas de prisión. Estas conexiones no autorizadas afectan la integridad del suministro eléctrico y pueden provocar cortes de luz y daños en la red.
Así que, si sospechas de un enganche ilegal, es fundamental que lo denuncies a las autoridades o a tu compañía eléctrica de inmediato. No solo estarás protegiendo tu hogar y a sus habitantes, sino también contribuyendo a mantener la seguridad y la correcta distribución del suministro eléctrico en tu comunidad.
Además, los enganches ilegales no solo afectan a quien los realiza, sino que también pueden perjudicar a los vecinos, creando un entorno de inseguridad y desconfianza. Actuar ante estos casos es una responsabilidad que todos debemos asumir para garantizar la seguridad y el bienestar de nuestro entorno.
