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radiador de agua

Qué gasta más: un convector, un emisor térmico o un radiador

Con la llegada del frío, elegir el sistema de calefacción más adecuado puede marcar la diferencia en la comodidad de tu hogar y en tu factura de la luz. Así que, si te preguntas cuál de estas opciones gasta más: un convector, un emisor térmico o un radiador, te ayudamos a comparar cada sistema para que tomes la mejor decisión según tus necesidades.

¿Qué es un convector, un emisor térmico y un radiador, y cómo funciona?

  • Un convector es un dispositivo que calienta el aire a través de resistencias internas. El aire frío entra por la parte inferior, pasa por la resistencia, se calienta y sale por la parte superior, lo que permite calentar una habitación rápidamente. Su principal ventaja es la rapidez en calentar un espacio, pero el calor no perdura mucho tiempo después de apagarlo, ya que se basa en el movimiento del aire caliente.

convector, calienta con aire caliente

  • Los emisores térmicos son aparatos eléctricos que, a diferencia de los convectores, utilizan una resistencia interna para calentar un material que, a su vez, emite el calor de manera progresiva. Este sistema permite mantener una temperatura constante durante más tiempo, lo que se traduce en una mayor eficiencia energética, ya que no es necesario encenderlo continuamente.
emisor térmico, caliente con resistencia es eléctrico

  • Los radiadores pueden ser de agua o de aceite. Los radiadores de agua funcionan conectados a un sistema de calefacción central (como una caldera de gas, o un sistema con aerotermia, geotermia o biomasa ), distribuyendo calor de manera uniforme por la casa. Los radiadores de aceite son similares a los emisores térmicos en cuanto a funcionamiento, pero no son tan eficientes en la retención del calor.
radiador por agua con instalación de sistema de calefacción

Consumo eléctrico y gasto energético: ¿cuál gasta más?

  • El consumo típico de un convector oscila entre los 750W y 2000W, dependiendo del modelo y su potencia. Los convectores tienden a gastar más energía a largo plazo, ya que el calor generado se disipa rápidamente una vez apagado. Son ideales para una calefacción puntual o en espacios pequeños, pero no para un uso prolongado debido a su menor eficiencia en la retención de calor.
  • Los emisores térmicos consumen entre 500W y 1500W, pero su tecnología de retención de calor hace que el consumo sea más eficiente en comparación con los convectores. Al poder mantener la temperatura por más tiempo sin necesidad de estar encendido constantemente, el gasto energético es menor a largo plazo, lo que los convierte en una opción más económica para uso continuado.
  • El consumo de un radiador varía dependiendo del tipo. En los radiadores de agua, el consumo depende del sistema de calefacción central, como una caldera de gas o biomasa, que suele ser más eficiente. En cambio, los radiadores de aceite eléctricos funcionan de manera similar a los emisores térmicos, aunque su eficiencia en la retención de calor es menor. Esto significa que, en términos de consumo eléctrico, un radiador eléctrico puede gastar más que un emisor térmico a largo plazo.

Eficiencia: ¿Cuál calienta mejor y más rápido?

  • El convector es el campeón de la rapidez. Si necesitas calentar un espacio de manera inmediata, un convector es tu mejor opción. Sin embargo, el calor no se mantiene por mucho tiempo una vez que lo apagas, lo que lo convierte en una opción menos eficiente si buscas mantener el calor de manera prolongada.
  • Aunque un emisor térmico tarda más en calentar un espacio que un convector, es más eficiente a largo plazo. Una vez alcanzada la temperatura deseada, el emisor térmico mantiene el calor por más tiempo, lo que genera una sensación de confort duradera sin un consumo energético excesivo.
  • Los radiadores de agua son extremadamente eficientes para calentar de forma prolongada y distribuir el calor de manera uniforme por la casa. Este sistema de calefacción centralizada es ideal para quienes buscan mantener una temperatura estable en todo el hogar, siendo una opción muy eficaz para un confort continuo.
  • El radiador de aceite calienta de manera similar a un emisor térmico, pero puede tardar un poco más en alcanzar la temperatura deseada. Además, no es tan eficiente en retener el calor como los radiadores de agua, por lo que es mejor para espacios pequeños o uso puntual.

Consumo: ¿cuál es más económico?

Para ilustrar este gasto, pongamos algunos ejemplos:

  • Si utilizas un convector de 2000W durante 5 horas al día, con un precio de la electricidad de 0,20 €/kWh, el coste diario sería de aproximadamente 2€, lo que se traduce en 60€ al mes. Es una opción económica si solo lo utilizas de manera ocasional en estancias pequeñas, pero puede resultar costosa si necesitas mantener el calor durante muchas horas al día.
  • Un emisor térmico de 1000W en funcionamiento durante 5 horas diarias tendría un coste de 1€ al día, o 30€ al mes. Gracias a su capacidad para mantener el calor más tiempo, es más económico que un convector si lo utilizas de manera continua.
  • El radiador de agua depende del coste del combustible utilizado para calentar el agua, como el gas o la biomasa. Aunque el consumo varía, el coste mensual puede rondar los 40€-50€ para una vivienda media, siendo una opción eficiente si ya tienes un sistema de calefacción centralizado.
  • Similar a un emisor térmico, pero con una menor eficiencia en la retención del calor. Un radiador eléctrico de 1500W consumiendo durante 5 horas costaría alrededor de 1,5€ al día, o 45€ al mes.

Compatibilidad con los sistemas de calefacción

  • El convector. No requiere instalación ni sistemas adicionales. Funciona de manera independiente con electricidad y es ideal para calentar áreas pequeñas o de uso ocasional. Perfecto si no quieres complicaciones.
  • El emisor térmico. También funciona de manera independiente, pero es más eficiente si lo necesitas para un uso continuado. Muchos emisores térmicos son compatibles con sistemas inteligentes, lo que permite programar su funcionamiento, mejorando aún más su eficiencia.
  • El radiador de agua. Este sistema necesita estar conectado a una caldera central, lo que lo hace ideal para viviendas que ya tienen un sistema de calefacción centralizado. Es la opción más eficiente para un uso prolongado en todo el hogar.
  • El radiador eléctrico. Al igual que el emisor térmico, no requiere instalación y funciona de manera independiente. Sin embargo, no es tan eficiente en retener el calor como el radiador de agua.

¿Cuál es la mejor opción según las necesidades?

  • Para calefacción puntual o de espacios pequeños. El convector es la opción más práctica y económica si lo necesitas para un uso temporal en espacios pequeños. Es ideal para calentar rápidamente sin preocuparte por el consumo a largo plazo.
  • Para uso continuado y eficiencia energética. El emisor térmico es perfecto si necesitas una solución que consuma menos electricidad y mantenga la temperatura constante durante largos periodos. Además, su compatibilidad con sistemas inteligentes lo hace aún más conveniente.
  • Para una instalación permanente y eficiente en toda la vivienda. El radiador de agua, en combinación con un sistema eficiente de gas, aerotermia, geotermia o biomasa, es la mejor opción en términos de confort, eficiencia y ahorro a largo plazo. Si ya tienes un sistema de calefacción, esta es tu mejor alternativa.

En definitiva, la elección entre un convector, emisor térmico o radiador depende de tus necesidades específicas de calefacción, el tamaño del espacio y el uso que le vayas a dar. ¡Elige la opción que mejor se adapte a ti y disfruta de un hogar cálido sin sorpresas en la factura!