El verano trae consigo días más largos, temperaturas más altas y un aumento en el uso de electrodomésticos para mantenernos cómodos y frescos. Sin embargo, este aumento en la demanda de energía puede traducirse en facturas de electricidad más elevadas, ya que el hábito más común en esta época del año es encender el aire acondicionado o poner el ventilador en funcionamiento.
Por suerte, existen estrategias inteligentes que puedes implementar para reducir el gasto de tus electrodomésticos durante los meses más cálidos del año. En este artículo, te presentamos consejos prácticos para optimizar tu consumo energético y mantener tus costos bajo control.
El consumo de luz durante el verano
Durante el verano, muchas personas experimentan un aumento en el consumo de electricidad debido al uso constante de electrodomésticos como el aire acondicionado, los ventiladores y otros dispositivos para combatir el calor, especialmente durante el mediodía, que es cuando el termómetro registra las temperaturas más elevadas.
Es importante ser consciente de cómo estos aparatos pueden afectar tu factura de electricidad y tomar medidas para reducir su impacto.
¿Cuáles son los electrodomésticos que más consumen?
Durante la temporada estival, ciertos electrodomésticos tienden a demandar más energía en el hogar:
- Aire acondicionado y ventilador. Este es uno de los principales factores detrás del incremento en el consumo energético durante los meses de verano. La tarea de mantener una temperatura agradable en casa puede requerir una cantidad notable de electricidad, especialmente si el sistema de aire acondicionado se encuentra en funcionamiento de manera constante.
- Nevera y congelador. En la época estival, es común que deba trabajar más para conservar la frescura de los alimentos debido a las temperaturas más altas. Adicionalmente, la frecuente apertura de la puerta y la necesidad de enfriar líquidos y alimentos calientes pueden contribuir al incremento en el consumo eléctrico.
- Si cuentas con una piscina, es importante tener en cuenta que el funcionamiento constante de la bomba y el sistema de filtración puede llevar a un aumento en el consumo energético, especialmente cuando se utilizan de manera regular para mantener el agua en condiciones óptimas y limpias.
- Aunque solemos optar por platos más frescos, el uso del horno para cocinar puede generar calor adicional en el hogar.
- Lavadoras. Las actividades al aire libre, como nadar o practicar deportes, pueden ocasionar la necesidad de lavar y secar más ropa, lo que aumenta la frecuencia de uso de esta máquina.
¿Conoces las horas de tu tarifa luz más baratas?
Si tienes una tarifa eléctrica con discriminación horaria, es fundamental conocer las horas de menor coste para ajustar tus hábitos de consumo. Durante el verano, es posible que las horas valle coincidan con momentos en los que tu demanda de energía es más alta, como las tardes calurosas. Aprovecha las horas de menor tarifa para ejecutar tareas de alto consumo energético.
Consejos para reducir el consumo de electrodomésticos
Conseguir una reducción en el consumo de luz durante el verano puede ser una tarea sencilla si sigues estos consejos.
Elimina el Stand-by: desenchufa los equipos electrónicos que no uses
El modo stand-by hace que los aparatos eléctricos como las televisiones o los ordenadores sigan consumiendo energía, aunque sea en un porcentaje muy bajo. Desenchúfalos cuando no los estés utilizando. En su lugar, utilizar regletas de enchufes con interruptores puede facilitar la desconexión de múltiples dispositivos a la vez.
Optimiza el uso de la nevera y el congelador
Ajusta la temperatura de tu refrigerador y congelador a niveles óptimos, asegurándote de no sobrecargarlos ni dejar las puertas abiertas por períodos prolongados.
Utiliza la lavadora con agua fría
Si tu ropa no está demasiado sucia, puedes aprovechar ciclos de lavado en frío para reducir el consumo de energía. La mayoría de los detergentes actuales no necesitan de más temperatura para ser eficaces. De esta manera, además, tu ropa durará más tiempo y se estropeará menos.
No uses la secadora
En lugar de utilizar la secadora de ropa, opta por tender la ropa en el exterior. Además de ahorrar energía, tus prendas obtendrán aroma a aire fresco que las secadoras no consiguen.
Lavavajillas: utiliza programas eficientes
Al igual que para la lavadora, utiliza programas de lavado largos y eficientes para el lavavajillas, ya que evitan calentar rápidamente el agua. Si es posible, carga el lavavajillas al máximo antes de hacer funcionar el ciclo, así utilizarás la misma cantidad de agua para lavar un mayor número de platos.
Control de Aire acondicionado
Establece el termostato del aire acondicionado a una temperatura cómoda y evita enfriar en exceso tus espacios. Si tienes un termostato programable, ajústalo para subir la temperatura cuando no estés en casa. Lo ideal es que se encuentre entre 24 y 25 grados, suficiente para estar cómodo en casa.
Además, no es necesario que refresques todas las habitaciones de tu vivienda. Seleccionar en cuáles vas a pasar más tiempo y encender el aire acondicionado o ventilador en esa estancia te ayudará a no derrochar energía.
Ventilación cruzada para airear la casa
Aprovecha las corrientes de aire naturales abriendo ventanas estratégicamente para permitir la ventilación cruzada y reducir la necesidad de ventiladores eléctricos.
¡Recuerda! Hazlo en las horas del día más frescas, cuando el sol no ha llegado a su punto más alto, como pueden ser la primera hora de la mañana o la última de la tarde.
Cuando el sol incida mucho, te aconsejamos que bajes las persianas, para evitar que el calor penetre en la vivienda a través de las ventanas.
Electrodomésticos de bajo consumo ¿Cómo reconocerlos?
Los electrodomésticos que utilizamos a diario son los responsables del elevado consumo energético de nuestra vivienda. Por eso, cuando elijamos uno nuevo, es importante que no solo nos fijemos en la potencia, el precio o la durabilidad, sino que busquemos en su consumo eléctrico, y en la etiqueta de bajo consumo.
Estos dispositivos cumplen con estándares rigurosos de eficiencia y suelen ser más económicos de operar a lo largo del tiempo.
Reducir el gasto de los electrodomésticos en verano no solo beneficia tu bolsillo, sino que también contribuye a un uso más responsable de la energía. Si sigues estos consejos y adoptas hábitos inteligentes, podrás disfrutar de la comodidad de tus dispositivos mientras mantienes tus facturas de la luz bajo control y contribuyes a la sostenibilidad ambiental.
