¿Estás en el proceso de seleccionar un sistema de calefacción para tu hogar y te encuentras en la encrucijada de decidir entre una caldera de gas o un termo eléctrico? No estás solo: muchos propietarios se tienen que enfrentar a este dilema.
Así que, para ayudarte a salir de esta encrucijada, hemos elaborado este post en el que analizamos las diferencias y ventajas y desventajas de ambas opciones, para que puedas tomar una decisión informada. ¿Te interesa? ¡Sigue leyendo!
Comparación de calderas: termo eléctrico vs. caldera de gas
Antes de profundizar, es fundamental entender cómo funcionan estos dos tipos de calderas y qué las distingue.
Termo eléctrico
Los termos eléctricos funcionan con electricidad y solo valen para agua caliente, no para calefacción, por lo que es ideal para locales o viviendas que no tengan acceso a una red de gas natural.
El funcionamiento de un termo eléctrico es el siguiente:
- Calientan el agua que acumulan y la conservan en la temperatura indicada.
- Una vez acabada, hay que esperar a que se llene de nuevo para calentarla y utilizarla.
Al no requerir una salida de humos, su instalación es muy sencilla, ya que solo hay que enchufarlo a la red eléctrica y conectarlo con las tuberías. Además, cabe en cualquier rincón.
Caldera de gas
Las calderas de gas, por otro lado, utilizan gas natural o gasóleo para generar calor y para calentar el agua. Son una opción común en los hogares debido a su eficiencia y costos operativos en general más bajos. Aunque es un sistema que necesita toma de gas natural, por lo que es necesario hacer obras para su instalación.
En este caso, el funcionamiento es el siguiente: el gas alimenta un quemador en la caldera, que luego calienta el agua. Este agua caliente se distribuye a través de los radiadores o sistemas de calefacción por suelo radiante para calentar tu hogar.
La potencia varía en función de las dimensiones del espacio que se quiere cubrir: no es lo mismo un baño y una cocina que un apartamento de varios lavabos, cocina y varias habitaciones. Calcula unos 115 W por metro cuadrado. Las potencias más comunes son 23-25 kW para viviendas estándar. En casas grandes o demasiado frías, entre 30 y 35.
Otras opciones
Otra opción pueden ser los calentadores, que pueden ser tanto de gas natural como de butano, propano o eléctricos. Pueden calentar el agua, ya que lo hacen en un circuito de combustión de gas.
Tienen un límite de producción que se mide por litros por minuto, siendo las más habituales 5, 10 o 15 litros por minuto. Su cálculo se realiza teniendo en cuenta el número de personas que viven en casa y cuántos puntos de consumo hay (baños, cocinas, electrodomésticos…). La gran ventaja de los calentadores es que su instalación es muy sencilla.
Factores que se deben tener en cuenta antes de elegir el mejor sistema para Agua Caliente Sanitaria (ACS)
Cuando se trata de elegir el sistema adecuado para el suministro de Agua Caliente Sanitaria (ACS) en tu hogar, es esencial evaluar diversos factores para asegurarte de que satisfaga las necesidades específicas de tu familia y contribuya a la eficiencia energética de tu hogar. A continuación, te presentamos algunos puntos clave que debes tener en cuenta antes de elegir una opción u otra.
Capacidad del agua caliente: limitada o ilimitada
La capacidad del sistema de ACS es un factor crucial. ¿Necesitas una cantidad constante de agua caliente o solo ocasionalmente? Algunos sistemas ofrecen un suministro limitado, mientras que otros proporcionan agua caliente de manera ilimitada. Evalúa las necesidades de tu hogar para determinar cuál es la mejor opción para ti.
Número de personas por hogar
El tamaño de tu familia influye directamente en la demanda de agua caliente. Un hogar más grande requerirá un sistema que pueda manejar un mayor flujo de agua caliente simultáneo. Asegúrate de seleccionar un sistema que se ajuste a la cantidad de personas que viven en tu hogar.
Precio de adquisición e instalación del termo o caldera
El presupuesto es un aspecto fundamental en la toma de decisiones. Considera no solo el precio de adquisición del sistema, sino también los costes asociados con la instalación. Algunos sistemas pueden requerir modificaciones en la infraestructura existente, lo que podría incrementar los gastos totales.
Consumos kWh, precio de la energía y potencia
Evalúa el consumo de energía del sistema y compáralo con el precio de la energía en tu región. También, ten en cuenta la potencia necesaria para satisfacer la demanda de tu hogar. Un sistema eficiente no solo reduce los costos operativos, sino que también contribuye a la sostenibilidad energética.
Mantenimiento e inspecciones
Antes de tomar una decisión, investiga los requisitos de mantenimiento del sistema. Algunos sistemas pueden necesitar inspecciones periódicas para garantizar un rendimiento óptimo. Considera el tiempo y los costos asociados con el mantenimiento para tomar una decisión informada.
Seguridad
La seguridad es primordial cuando se trata de sistemas de ACS. Asegúrate de que el sistema seleccionado cumpla con los estándares de seguridad vigentes. Investiga sobre las características de seguridad incorporadas y la reputación del fabricante en cuanto a la fiabilidad y durabilidad del sistema.
Impacto medioambiental
En un mundo cada vez más consciente del medio ambiente, es importante considerar el impacto ecológico de tu elección. Investiga y elige sistemas que sean eficientes en términos de energía y que minimicen su huella ambiental.
Ventajas e inconvenientes del termo eléctrico y la caldera de gas
Ambos tipos de calderas tienen sus propias ventajas y desventajas que debes considerar al tomar tu decisión:
Termo eléctrico | Caldera de gas | |
Instalación y coste inicial | Instalación sencilla. No requiere salida de humos, facilitando y abaratando la instalación. | Requiere salida de humos, complicando y encareciendo la instalación. |
Mantenimiento | Las calderas eléctricas generalmente requieren menos mantenimiento. | Las calderas de gas requieren mantenimiento y revisiones anuales para garantizar su correcto funcionamiento. |
Seguridad | No hay riesgo de fugas de monóxido de carbono, ya que no quema combustible. | Requiere atención a posibles fugas de monóxido de carbono y precauciones adicionales debido al uso de gas. |
Agua caliente | Limitada, depende de la capacidad del depósito. | Ilimitada, se calienta a demanda, proporcionando agua caliente continua. |
Tiempo de recuperación | Casi inmediata. | Alrededor de 2 minutos para alcanzar la temperatura deseada. |
Eficiencia energética | Generalmente menor que otros sistemas, dependiendo de la generación de electricidad. La modalidad de autoconsumo es, sin duda, la más eficiente. | Mayor eficiencia, especialmente en calefacción. Puede ser más sostenible si se utiliza gas natural limpio o energía renovable. |
¿Qué es más barato: calentar agua con gas o electricidad?
La elección entre una caldera eléctrica y una de gas no solo se basa en las características y ventajas de cada una, también es fundamental considerar los gastos asociados.
Termo eléctrico
El precio de los termos eléctricos puede variar según su capacidad, marca y tecnología, pero, en general, los precios oscilan entre 900 € y 2000 €. Además del desembolso inicial de la caldera, también debes tener en cuenta los gastos de instalación y los costes operativos.
El consumo de una caldera eléctrica puede variar según varios factores, incluyendo la potencia de la caldera, el tamaño de la vivienda y los hábitos de uso. Sin embargo, en términos generales, una caldera eléctrica de 24 kW consume alrededor de 720 kWh mensuales.
Caldera de gas
Los precios de las calderas de gas tienden a ser más altos, oscilando entre 1000 € y 3000 €, dependiendo de la marca y la potencia de la caldera. A este hay que añadirle el coste de la instalación, que puede ser más complicada debido a la necesidad de una salida de humos. Sin embargo, los costes operativos pueden ser más bajos debido al menor precio del gas en comparación con la electricidad.
El consumo de una caldera de gas también puede variar, pero en general, una caldera de gas en una vivienda se sitúa en torno a los 13.700 kWh/año.
Entonces, ¿qué sistema es más barato para calentar el agua: gas o electricidad?
En general, el gas suele ser más barato que la electricidad. Sin embargo, esto puede variar dependiendo de tu consumo y de las tarifas de energía en tu área.
¿Existen subvenciones para la compra o renovación de termos eléctricos o calderas de gas?
En España, las calderas de gas natural o gasoil son la tecnología predominante en el parque de edificios, con más de 9,7 millones de unidades instaladas. Con el objetivo de fomentar la sustitución de las antiguas, diversas comunidades autónomas han implementado iniciativas como el Plan Renove de Calderas de la Comunidad de Madrid. Este programa tiene como misión principal reemplazar las calderas de gas natural por calderas de condensación, no solo para reducir el consumo de energía, sino también para disminuir las emisiones a la atmósfera y mejorar la seguridad de las instalaciones. Asimismo, se busca la sustitución de los calentadores atmosféricos por calentadores estancos.
Estas iniciativas ofrecen incentivos económicos a los propietarios de viviendas empadronados en la respectiva comunidad autónoma. Las ayudas oscilan entre 100 y 500 euros por vivienda, dependiendo de las características específicas de cada plan.
Para obtener información sobre la activación de estas ayudas en tu comunidad autónoma, te aconsejamos que consultes el boletín oficial en la página web oficial de la institución o del departamento de energía correspondiente.
En resumen, tanto el termo eléctrico como la caldera de gas presentan ventajas y desventajas diferentes. La mejor opción para ti dependerá de tus necesidades de calefacción, tu presupuesto, la disponibilidad de gas o electricidad en tu área y tus preferencias personales.