La elección entre el horno y la freidora de aire para cocinar puede depender de diversos factores, entre ellos, el consumo energético. Con el creciente interés en la eficiencia energética en el hogar, surge la pregunta: ¿Cuál de estos electrodomésticos consume más electricidad? ¡Te lo contamos!
Impacto del consumo de energía de los electrodomésticos en la factura de la luz
La cocina es un espacio fundamental en nuestros hogares, no solo por su rol central en la preparación de comidas sino también por su significativa contribución al consumo energético de la vivienda. La Estadística Anual de Consumo Energético Residencial, desarrollada por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, revela la importancia de entender y optimizar nuestro consumo de energía en la cocina, junto con otros usos domésticos como la calefacción, refrigeración, calentamiento del agua e iluminación. Por otro lado, el Instituto para la Diversificación y Ahorro de Energía, (IDAE), aporta en su último informe que el gasto eléctrico en esta estancia de la casa creció exponencialmente en la última década.
El consumo eficiente y el ahorro de energía en la cocina y en el hogar en general, no solo tienen un impacto directo en la reducción de la factura energética de los hogares, sino que también son cruciales para la sostenibilidad ambiental. Promover prácticas de consumo eficiente ayuda a disminuir la demanda de recursos energéticos y reduce las emisiones de gases de efecto invernadero, alineándose con los objetivos de transición ecológica y combate al cambio climático.
Funcionamiento y consumos del horno convencional
En España, el consumo medio anual de un hogar es de aproximadamente de 4.000 kWh, y el horno representa solo el 4% de este consumo en los electrodomésticos. Aunque puede parecer menor, es importante tener en cuenta este porcentaje para la gestión energética de la vivienda.
El consumo de un horno varía según el uso, el modelo, e incluso el horario en el que se utiliza si se cuenta con tarifas con discriminación horaria. Por ejemplo, y teniendo en cuenta que los precios cambian diariamente, cocinar un pollo de 1,5 kg a 220º C durante 80 minutos a las 14 horas en horario llano puede costar alrededor de 0,20 €, mientras que hacerlo en horario punta puede elevar el coste a 0,34 €. Por otro lado, preparar un bizcocho durante 1 hora a 160º C en horario llano tendría un coste de 0,10 €, aumentando a 0,17 € si se hace en horario punta.
Para optimizar el consumo energético del horno, es recomendable seguir algunos consejos como elegir un horno de alta eficiencia energética (etiquetas A o B), evitar abrirlo innecesariamente, aprovechar su capacidad al máximo, y apagarlo un poco antes de finalizar la cocción para utilizar el calor residual.
En cuanto a la comparación con otros electrodomésticos, como la freidora de aire, el horno convencional suele tener un consumo mayor debido a su mayor capacidad y tiempo de uso. Las freidoras de aire, que consumen entre 700 W y 2.000 W dependiendo del modelo, se presentan como una alternativa más económica en términos de consumo energético, especialmente para cocciones rápidas y con menos cantidad de alimentos. Sin embargo, es importante destacar que el horno convencional tiene una mayor capacidad, lo que lo hace más eficiente para cantidades mayores de alimentos. En este caso el horno convencional podría ser la opción más adecuada.
Funcionamiento y consumos de la freidora de aire
Las freidoras de aire se han popularizado como una alternativa saludable y eficiente a la fritura tradicional. Utilizan un mecanismo de circulación de aire caliente para cocinar los alimentos, lo que les permite obtener una textura crujiente sin necesidad de sumergirlos en aceite. Esto no solo reduce significativamente la cantidad de grasa en los platos preparados, sino que también afecta su consumo energético.
En comparación con los hornos tradicionales, las freidoras de aire consumen menos energía por varias razones:
- Tiempo de calentamiento más rápido. Al ser más compactas, las freidoras de aire alcanzan la temperatura deseada en menos tiempo.
- Cocción más eficiente. La circulación forzada de aire caliente facilita una cocción rápida y uniforme.
- Menor tiempo de cocción. Generalmente, los alimentos se cocinan más rápido en una freidora de aire que en un horno tradicional.
Algunos ejemplos de un consumo estimado visto desde diferentes preparaciones:
- Patatas fritas. Una porción de patatas fritas puede cocinarse en una freidora de aire en aproximadamente 15 minutos a 180°C, consumiendo alrededor de 0.3 kWh, mientras que en un horno convencional este proceso podría tomar cerca de 30 minutos y consumir aproximadamente 0.7-1 kWh.
- Pollo asado. Cocinar un pollo entero en una freidora de aire puede tomar cerca de 30 minutos a 190°C, con un consumo de alrededor de 0.9 kWh. En contraste, un horno tradicional podría requerir al menos 1 hora para cocinar un pollo de tamaño similar, pudiendo consumir hasta 2 kWh.
- Verduras asadas. Las verduras como el brócoli, coliflor o zanahorias pueden asarse en una freidora de aire en unos 10 minutos a 200°C, consumiendo aproximadamente 0.25 kWh. En un horno, este proceso tomaría cerca de 25-30 minutos y consumiría alrededor de 0.5-0.75 kWh.
¿Qué consume más un horno convencional o una freidora de aire?
Cuando se compara un horno convencional con una freidora de aire en términos de consumo eléctrico, potencia y costes, para cocciones con tiempos y modos similares, por lo general, la freidora de aire resulta ser más eficiente energéticamente. Mientras que un horno convencional puede consumir alrededor de 2.000 vatios por hora, una freidora de aire utiliza entre 1.400 y 1.700 vatios aproximadamente. Además, los hornos suelen operar durante periodos más largos (45 minutos a 1 hora) en comparación con las freidoras de aire, que frecuentemente se usan durante 15 a 30 minutos para muchas recetas. Esto significa que, por uso, una freidora de aire consume menos electricidad (entre 0,7 y 0,85 kWh en media hora) en comparación con el horno (alrededor de 2 kWh en una hora), lo que se traduce en un coste menor y un impacto reducido en la factura eléctrica.
¿Que gasta más luz un horno microondas o una freidora de aire?
En cuanto al consumo de electricidad entre un horno microondas y una freidora de aire, el microondas tiene un consumo medio de 0,25 kWh, mientras que el de la freidora de aire suele ser ligeramente superior. Esto indica que, en términos de consumo energético, el microondas es más eficiente que la freidora de aire. Sin embargo, el uso real y la eficiencia pueden variar según el modelo específico y la frecuencia de uso de cada aparato.
¿Cuál es más saludable horno convencional, microondas, o freidora de aire?
La elección entre horno convencional, microondas o freidora de aire depende de varios factores, incluyendo la eficiencia energética y la salud. Las freidoras de aire, por su diseño, permiten cocinar alimentos con menos aceite, lo que puede ser una ventaja para quienes buscan reducir el consumo de grasas. Sin embargo, el uso moderado de aceite de oliva en el horno también puede ser saludable. En términos de eficiencia energética, tal y como se ha recalcado, las freidoras de aire suelen consumir menos electricidad que los hornos convencionales debido a su menor tiempo de cocción y menor pérdida de calor. Sin embargo, es importante considerar que el horno convencional tiene una mayor capacidad, lo que lo hace más eficiente para cantidades mayores de alimentos. En este caso, el horno convencional podría ser la opción más adecuada a pesar de su mayor consumo energético.
